He vendido mi coche: ¿quién paga el impuesto de circulación?
Si estás pensando en poner a la venta tu coche para hacerte con un modelo nuevo, por ejemplo, a través de renting, es normal que tengas preguntas. La fiscalidad de los automóviles es uno de los aspectos que más suelen preocuparnos. Una de estas preocupaciones más recurrentes es saber quién paga el impuesto de circulación si vendo el coche.
Antes de entrar en detalles sobre el impuesto de circulación de un coche vendido, conviene hacer un repaso rápido sobre la fiscalidad y su regulación. Más que nada para que tengas claros todos los conceptos.
El Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (ITVM) es el nombre oficial del impuesto de circulación, a veces también llamado sello o viñeta. Es un tributo directo sobre la titularidad de un automóvil apto para desplazarse por la vía pública. Esto es, los coches que están matriculados en el registro oficial de la DGT (Dirección General de Tráfico).
Saber quién paga el impuesto de circulación si he vendido el coche es importante por la propia naturaleza de este tributo. Se abona de forma anual, normalmente entre abril y mayo, pero su vigencia es desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre. El ayuntamiento donde estás censado es el que gestiona los abonos y el importe a cubrir, que varía en función del municipio.
La cantidad que debes pagar se calcula en función de 3 componentes: el lugar de residencia, el tipo de vehículo y las emisiones contaminantes de su motor. Recuerda que un coche más contaminante está obligado a pagar más impuesto de circulación.