¿Cómo se hace el cálculo de retribución en especie de un vehículo de renting?

Cada vez más empresas apuestan por el renting de coches como una forma de compensar a sus empleados. La entrega de un vehículo es una estrategia para retribuir por un trabajo sin hacerlo con dinero en efectivo. Si estás planeando utilizar esta herramienta, seguro que quieres saber cómo se hace el cálculo de retribución en especie de un vehículo de renting La remuneración a un trabajador por medio de un coche de renting tiene la denominación legal de retribución en especie. Es una fórmula más habitual de lo que crees y está regulada por la Ley 25/2006, de 28 de noviembre, del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF), la que determina qué rentas pasan por la caja de Hacienda.  La norma, por lo que respecta a la retribución en especie de un vehículo de renting, es clara: «Se considerarán rendimientos íntegros del trabajo todas las contraprestaciones o utilidades, cualquiera que sea su denominación o naturaleza, dinerarias o en especie, que deriven, directa o indirectamente, del trabajo personal o de la relación laboral o estatutaria». Ahora bien, el renting como retribución en especie tiene sus límites, marcados por el Estatuto de los Trabajadores: «En ningún caso, el salario en especie podrá superar el treinta por ciento de las percepciones salariales del trabajador, ni dar lugar a la minoración de la cuantía íntegra en dinero del salario mínimo interprofesional». Dicho de otro modo: un coche de renting forma parte de la nómina de un empleado pero su valor nunca podrá superar el 30% del salario. Ahora bien, el cálculo de este tipo de retribución es un poco más complejo, así que entramos en detalles. 

Cómo calcular la retribución en especie de un coche de renting

Un automóvil de renting para un empleado supone, parafraseando la legislación, «la utilización, consumo u obtención, para fines particulares, de bienes, derechos o servicios de forma gratuita o por precio inferior al normal de mercado».  El renting como retribución en especie se calcula imputando un 20% anual sobre el valor de mercado que correspondería al vehículo como si fuese nuevo, ya que no es propiedad de la empresa sino de la compañía de renting. Por cierto, esta valoración se puede reducir hasta en un 30% si el modelo se considera eficiente energéticamente.  Ten en cuenta que en este porcentaje se incluyen, además, todos los gastos inherentes a la tenencia y mantenimiento del vehículo, servicios que suele prestar la firma de renting que contratas para que tu empleado pueda disfrutar de un coche tanto durante su jornada laboral como fuera de ella.  Como estos cálculos pueden resultar complicados, lo mejor que veamos un ejemplo. 

Ejemplo de retribución en especie de un vehículo de renting

Quieres que uno de los comerciales de tu empresa, que gana 30.000€ al año, disfrute del renting de un Fiat 500 Este modelo nuevo tiene un precio de mercado de unos 12.000€. Si a esta cantidad le aplicamos el 20%, obtenemos un valor de 2.400€ al año. Suponiendo que el empleado reciba 12 pagas, el cálculo de la retribución en especie de este vehículo de renting se quedaría en 200€ al mes Para comprobar que la legislación te permite bonificar a tu comercial con este coche, comprobamos que el valor de 2.400€ supone solo un 8% de su salario. Al no superar el 30% permitido para la retribución en especie, no tendrías ningún problema.  Como has podido comprobar en este ejemplo de retribución en especie de un coche renting, en el fondo no es tan difícil establecer cuánto dinero supone y si la empresa se lo puede permitir. Si esta entrada te ha sido de utilidad, compártela en tus redes sociales.