10 Mayo 2021
Llega el momento de presentar la Declaración de la Renta y aquellos que recibieron ayudas para comprar un coche deben tener mucho cuidado. La razón es que esas ayudas no son libres de impuestos, se consideran ganancia patrimonial, de modo que se deben reflejar en la declaración. El problema es que en algunos casos pueden salir mucho más caras de lo que se piensa.
En 2020 miles de personas recibieron ayudas para comprar un coche. Por un lado, aquellos que obtuvieron subvenciones a cargo del Plan Renove, destinado a fomentar la renovación del parque automovilístico. Este plan ofrece ayudas con cuantías de entre 400 y 4.000 euros. La cantidad depende tanto de la etiqueta medioambiental del vehículo como de su consumo energético
Por otro lado, están quienes acudieron al Plan Moves II, cuyo objetivo era incentivar la adquisición de modelos eficientes, es decir, eléctricos e híbridos enchufables. En este caso, el plan preveía cuantías máximas de 4.000 euros para turismos, dependiendo de la autonomía del vehículo.
Teniendo en cuenta sólo la cantidad que se podía recibir en ayudas para comprar un coche, estos planes resultan muy tentadores para los compradores. Y muchos de quienes las obtuvieron en su momento y no hicieron cuentas se han llevado, o se van a llevar, una desagradable sorpresa al hacer la Declaración de la Renta.
Las ayudas para comprar coche se deben declarar
A la hora de saldar cuentas con Hacienda, y es lo que muchas personas todavía desconocen, es que esas ayudas para comprar coche tributan. Por lo tanto, hay que incluirlas en la Declaración de la Renta como ganancia patrimonial en el mismo apartado que el salario y otras rentas de la base general del IRPF. Lo que esas ayudas para comprar coche puedan significar en el resultado de la declaración va a depender tanto de la cantidad recibida como del tramo en el que se tribute, ya que en cada uno de ellos el tipo impositivo varía. Y es, precisamente, en los tramos donde las subvenciones pueden resultar un fiasco. Se percibe más claramente con ejemplos. El tramo de ingresos hasta 20.200 tiene en la Declaración de la Renta de 2020 una base liquidable del 24 %. Si obtuvo una ayuda de 1.000 €, pagará por ella 240 euros. Pero, el siguiente tramo, hasta 35.200 euros de ingresos, tributa un 30 %, es decir, habría que pagar 300 euros.A veces las ayudas pueden salir caras
Hasta ahí, esas ayudas para comprar coche seguirán siendo favorables para quienes las hayan solicitado y recibido. El problema surge cuando se dan dos circunstancias. La primera de ellas es la de aquellos contribuyentes que se encuentran en el límite entre un tramo u otro. Lo vemos, de nuevo con un ejemplo. A una persona con ingresos de 35.000 euros se le aplica una base liquidable del 24 %. Si se recibió una ayuda de 1.500 euros, estos ingresos serían de 36.500, de modo que saltaría al siguiente tramo, que tributa al 30 %. En ese caso, el resultado final de la Declaración de la Renta puede resultar mucho menos beneficioso de lo que se pensaba. La segunda circunstancia en la que esas ayudas para comprar coche pueden salir caras es en el caso de rentas muy bajas. En principio, aquellas personas que no hayan percibido más de 22.000 de un único pagador no tienen obligación de presentar la Declaración de la Renta. Pero, aunque esos contribuyentes no tengan que declarar por sus rendimientos de trabajo, sí deberán hacerlo si han recibido ayudas por la compra de un coche. La primera razón es que, en ese caso, se considera que hay dos pagadores. La segunda, que cuando se perciben ganancias patrimoniales derivadas de ayudas públicas con cuantías superiores a 1.000 € también se establece la obligatoriedad de hacer la declaración.El consejo: hacer cuentas antes de solicitar las ayudas
Quienes tengan que hacer frente a la Declaración de la Renta de este año, deben tener en cuenta que han de incluir esas ayudas para comprar coche. De no hacerlo, podrían tener que presentar una declaración complementaria si Hacienda se percata de la omisión. Para aquellos que aún no hayan comprado un vehículo y estén esperando la oportunidad para beneficiarse de algunas de las ayudas a la compra de coches que este año ofrece el Estado, el consejo es no precipitarse. Conviene sentarse, calculadora en mano, y comprobar si compensa o no según los ingresos. Y hay una tercera opción: dejar a un lado la compra del vehículo y decantarse por una opción con muchas ventajas: el renting de Vamos. Con él podrás disfrutar de ese coche nuevo con el que sueñas sin necesidad de pagar impuestos ni de cumplir con Hacienda si recibes una ayuda que, al final, puede quedarse en mucho menos de lo que imaginabas. No solo eso, si eres autónomo o tienes una empresa y los vehículos se dedican en exclusiva a la actividad profesional, podrás desgravar en el IRPF o el Impuesto de Sociedades el 100 % de la cuota.
Estás a unos pasos de encontrar tu coche ideal
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